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viernes, 11 de diciembre de 2015

NO COMO LAS FLORES...

"Mira, nosotros no amamos como las flores, siguiendo tan solo el ciclo del año. A nosotros, cuando amamos, nos sube por los brazos una savia inmemorial" 

Rainer María Rilke (1875-1926), poeta alemán, un fragmento de las "Elegías de Duino" (p.39, editorial poesía Hiperión)

jueves, 10 de diciembre de 2015

COMO...

"Hablo como en mí se habla. No mi voz obstinada en parecer una voz humana sino la otra que atestigua que he cesado de morar en el bosque" 

Alejandra Pizarnik en "Extracción de la piedra de la locura"

Landscape Drawing Of A Forest by JurrellGraham

sábado, 5 de diciembre de 2015

PARÁBOLA DE LAS MANOS

"Esta mano toma un fruto,
La otra lo aleja.
Una mano recibe al halcón, se quita un guante, 
La otra lo ahuyenta, prende una antorcha.
Una mano escribe cartas de amor
Que su equívoca siamesa puebla de injurias.
Una mano bendice, la otra amenaza,
Una dibuja un caballo,
La otra, un puma que lo espanta.
Pinta un lago la mano diestra:
La ahoga en un río de tinta, la siniestra.
Una mano traza la palabra pájaro, 
La otra escribe su jaula.
Hay una mano de luz que construye escaleras.
Una sombra que afloja sus peldaños.
Pero llega la noche. Llega
La noche cuando cansadas de herirse 
Hacen tregua en su guerra
Porque buscan tu cuerpo"

Juan Manuel Roca (1946-actualidad), poeta colombiano

jueves, 26 de noviembre de 2015

SOBRE EL OPTIMISMO DE LOS POETAS...

"[...] harto a menudo nos aseguran que en todo hombre se esconde un poeta, y que el último poeta sólo desaparecerá con el último de los hombres"

Sigmund Freud en " El creador literario y el fantaseo" (Tomo IX de Obras Completas)

sábado, 21 de noviembre de 2015

NO HAY... (EN MEMORIA DE L.A.T.G.)

No hay palabras justas para la tragedia, tan solo existen palabras...


 Descansa en paz querida Lilí,
tu partida nos deja un enorme hueco

miércoles, 11 de noviembre de 2015

CONSTRUCCIÓN



"Amó aquella vez como si fuese última
besó a su mujer como si fuese última
y a cada hijo suyo cual si fuese el único
y atravesó la calle con su paso tímido
subió a la construcción como si fuese máquina
alzó en el balcón cuatro paredes sólidas
ladrillo con ladrillo en un diseño mágico
sus ojos embotados de cemento y lágrimas

sentóse a descansar como si fuese sábado
comió su pan con queso cual si fuese un príncipe
bebió y sollozó como si fuese un náufrago
danzó y se rió como si oyese música
y tropezó en el cielo con su paso alcohólico
y flotó por el aire cual si fuese un pájaro
y terminó en el suelo como un bulto fláccido
y agonizó en el medio del paseo público
murió a contramano entorpeciendo el tránsito

amó aquella vez como si fuese el último
besó a su mujer como si fuese única
y a cada hijo suyo cual si fuese el pródigo
y atravesó la calle con su paso alcohólico
subió a la construcción como si fuese sólida
alzó en el balcón cuatro paredes mágicas
ladrillo con ladrillo en un diseño lógico
sus ojos embotados de cemento y tránsito

sentóse a descansar como si fuese un príncipe
comió su pan con queso cual si fuese el máximo
bebió y sollozó como si fuese máquina
danzó y se rió como si fuese el próximo
y tropezó en el cielo cual si oyese música
y flotó por el aire cual si fuese sábado
y terminó en el suelo como un bulto tímido
agonizó en el medio del paseo náufrago

murió a contramano entorpeciendo el público

amó aquella vez como si fuese máquina
besó a su mujer como si fuese lógico
alzó en el balcón cuatro paredes flácidas
sentóse a descansar como si fuese un pájaro
y flotó en el aire cual si fuese un príncipe
y terminó en el suelo como un bulto alcohólico
murió a contromano entorpeciendo el sábado

por eso el pan de comer y el suelo para dormir,
registro para nacer, permiso para reir,
poder dejarme respirar, y por dejarme existir,

Diooos leee pagueee,
por esa grapa de gracia que tenemos que beber,
por ese jugo desgracia que tenemos que toser,
por dos andamios de gente para subir y caer,
Diooos leee pageee,
por esa tia que un día nos va a vurlar y escupir,
y por las moscas y besos que nos vendrán a cubrir,
y por la capa postrera que al fin nos va a redimir,
Diooos leee paaagueee"


Chico Buarque (Río de Janeiro, 19 de junio de 1944-actualidad),  poeta, cantor, guitarrista, compositor, dramaturgo y novelista brasileño

domingo, 5 de julio de 2015

DESPEDIDA

"Entre mi amor y yo han de levantarse
trescientas noches como trescientas paredes
y el mar será una magia entre nosotros.

No habrá sino recuerdos.
Oh tardes merecidas por la pena,
noches esperanzadas de mirarte,
campos de mi camino, firmamento
que estoy viendo y perdiendo...
Definitiva como un mármol
entristecerá tu ausencia otras tardes" 


Jorge Luis Borges (1899-1986), escritor argentino

miércoles, 4 de marzo de 2015

LA NOCHE

"Poco sé de la noche
pero la noche parece saber de mí,
y más aún, me asiste como si me quisiera,
me cubre la existencia con sus estrellas.

Tal vez la noche sea la vida y el sol la muerte.
Tal vez la noche es nada
y las conjeturas sobre ella nada
y los seres que la viven nada. 

Tal vez las palabras sean lo único que existe
en el enorme vacío de los siglos
que nos arañan el alma con sus recuerdos.

Pero la noche ha de conocer la miseria
que bebe de nuestra sangre y de nuestras ideas.
Ella debe arrojar odio a nuestras miradas
sabiéndolas llenas de intereses, de desencuentros.

Pero sucede que oigo a la noche llorar en mis huesos.
Su lágrima inmensa delira
y grita que algo se fue para siempre.

Alguna vez volveremos a ser."

Alejandra Pizarnik (1936-1972), poeta argentina

 

sábado, 28 de febrero de 2015

COMME LE PLUIE...


SOLEDAD Y SILENCIO

"Soledad y silencio. He pensado en la felicidad de dedicarme enteramente a la literatura, sin otros cuidados sino escribir y estudiar. Es necesario recuperar el tiempo perdido. Sé que esta felicidad está a mi alcance y que no depende de mi voluntad, pues entonces ya no sería felicidad sino solamente trabajo. Sólo necesito creer con todo mi ser, creer obsesiva y lúcidamente. Y también olvidarme de todos. Pero sobre todo continuar sosteniéndome en la durísima tarea de no pensar en «el amor imposible», causa de todos mis males. Esto es lo más difícil. Y particularmente para mí, que no me llegan compensaciones externas que pudieran impulsarme a sustituir al objeto amado. Pero sé que mi única posibilidad de salvación consiste en aceptar con naturalidad esta carencia afectiva.
Mi única posibilidad de salvación, sí. Ahora comprendo absolutamente que jamás mi amor se verá correspondido, que hasta hoy me sustentaba alguna esperanza absurda e infantil, sin fundamento alguno en la realidad. Pero hoy, recordando el ayer, recobrando palabras y sucesos que dormían debajo de mi memoria he tomado conciencia de la futilidad de mi espera. Ahora bien, resta la locura o la muerte, porque yo comprendo que sólo por mi amor vivo, que sólo él me enlaza a la vida. Y tal vez no quisiera que fuese así, si bien reconozco que a ello debo mis horas más intensas, más fecundas emocionalmente, las que no poco hicieron por mis poemas. A mi amor debo casi todos mis estados de exaltación. Pero también es útil saber que el hombre que los produjo es absolutamente «inocente» de mis procesos, que su actitud fue siempre pasiva, que, en suma, no tiene «culpa» alguna de lo que me acontece, así como el desierto no es culpable de los que mueren sedientos. De cualquier modo, comprendo que es necesario estrangular todo atisbo de esperanza y aceptar la idea de que jamás seré amada por la persona que he elegido. Podría agregar que no la he elegido sino que me ha sido impuesta, podría repetir los viejos argumentos científicos respecto de los orígenes de mi sentimiento amoroso. Pero es como en la poesía. Palabras, palabras… El amor es otra cosa. Y no me importa que maltraten el mío ni que lo castiguen con la indiferencia más extrema. Yo sé que es real, yo sé que existe y me duele más que mi vida, o igual, porque es mi vida. Lo mismo que la poesía. ¿En que la desmedra el análisis o la disección? Está, y es lo único importante. Pero ahora, sobre materiales rotos y roídos, entre el caos y la angustia, trataré de reconstruirme. Sobre tanto dolor, sobre tantas ganas de morir y de no sufrir más el peso de este amor, he de reconstruirme. Con humildad y silencio.
Este yacer anegada en mí misma, este no perderme jamás de vista —aun en la enajenación— ¿a qué obedece? A que no encuentro nada que sea más importante que yo. Sólo me entero de las cosas cuando me golpean. Así, gracias al silencio de Orestes, he pensado por vez primera en él. Cosa que jamás hice cuando deliraba de amor por mí. Esta manera de ser me hace perder y ganar. Perder en cuanto a que me encadena, me impide enfrentar el mundo, y más aún, me deja a merced del mundo. Pero, por otra parte, en el reverso del mundo, donde yo estoy, se ven muchas cosas vedadas para los otros. A propósito de mi incomunicación estuve pensando en la posibilidad de enloquecer, posibilidad que me aterroriza. Pero estoy demasiado cansada como para inquietarme «activamente». Pensándolo bien, ¿no será demasiado tarde para reconstruirme? ¿No habré perdido definitivamente?"

Alejandra Pizarnik (1936-1972), poeta argentina, un fragmento de Diarios (domingo 2 de Febrero de 1958 )


miércoles, 21 de enero de 2015

LA RUEDA DE NÁUSEA...OLGA OROZCO

"Echada hacia  adelante me aferro con las dos manos a los crines del caballo. Querría pegarme a él, querría entrar en él a través de la piel, si me lo permitiera. Estar en cuatro pies o más es mi verdadera condición. Me han colocado en dos para medirme con un mundo que no me corresponde, que marcha a otra carrera, que se desliza hacia atrás llevádose adherido el extremo más interior de mi organismo, y por lo tanto me va desenrollando de esta rueda de vacío que gira a una velocidad endemoniada en el centro de mí. ¡Yo hablaba de tejidos! Me están destejiendo, están devanando mi madeja de misterio, me están desprendiendo de una trama en la que me creía entretejida hasta el final, y el hueco de la rueda aumenta por dentro vertiginosamente, devora mis sostenes con un sabor a gris pulverizado, a viento que se infla, a vómito de ayuno. No entiendo la sustancia que me abandona ni puedo asimilar esta náusea giratoria que la reemplaza. si me arrojo ahora mismo del caballo, la sustancia que me abandona regresará de golpe a mi interior como un elástico, colmará a la naúsea y estallaré en miles de pedazos: si continuo en el caballo, seguirá adelantándose hacia atrás, y la rueda de náusea, después de tocar fondo, arrojará mi cáscara sin nada contra alguna pared del universo. ¿Porqué me están volviendo al revés? ¿Y hasta cuándo?"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.20).

martes, 20 de enero de 2015

A LO QUE ENFRENTO CON LOS OJOS...OLGA OROZCO

"Giramos otra vez en un rayo de la rueda; en el centro del eje, la cara de Alejandro. Nuevamente al galope. Pero ahora no tengo temor de las bestias que urde la noche a mis espaldas, ni de la mano impensable que se alarga para arrebatarme, porque el abuelo Damián me ha corrido hacia adelante en el recado y me protege la espalda con su cuerpo y los costados con la barrera que forman el brazo que me ciñe y las dos riendas. ¿Quién le hablò de mis miedos?
En adelante, cualquier forma que tome el camino podrá ser descubierta por él al mismo tiempo que por mi. Siempre tengo menos miedo a lo que enfrento con los ojos que a lo que pueda sorprenderme sin que yo lo haya visto. Por eso duermo con la espalda pegada a la pared y no puedo sentarme sino dando la cara frente a una puerta abierta. Aunque no oiga nada, hay ovillos que significan otra cosa y que caen, rebotan y se deslizan astutamente silenciosos; aunque no vea nada hay algo que están tejiendo contra mí. 
Claro que ahora todo está tan oscuro que casi es como si sucediera atrás, y como si ese atrás fuera la noche entera que se está enredando para envolvernos. La siento trabajar, muy cerca, agazapada entre los matorrales agitados que se abren y se espesan bordeando el campo abierto pero impenetrable contra el cielo tenebroso; la siento preparar sus materiales, disolver a lo lejos esos resplandores pàlidos que de pronto se insinúan como una salvación, para incorporarlos a su propia sustancia, a la madeja del horror; la siento tender a los costados las apretadas telas con que abrá de ceñirnos" 

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.18 y 19).


lunes, 19 de enero de 2015

ME ESTÁ HELANDO LAS LÁGRIMAS... OLGA OROZCO

"[...] mi sangre corre arrastrando una sangre inmóvil como una piedra que continúa hasta que también la mía sea piedra; mi corazón late sobre un corazón paralizado definitivamente por la escarcha. Ahora mismo me está helando las lágrimas"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.17).



domingo, 18 de enero de 2015

ADIÓS...OLGA OROZCO

" ´Adiós, tía Valeria. Te vas a aquedar encerrada para siempre entre vidrios ahumados, como en un eclipse. No importa. Igual te verán. Te están espiando para devorarte todos los cajones de tu casa, y las plantas se disecan mientras duermen, y en todos los rincones hay encapuchados de ojos luminosos que hacen señas de tigres de Bengala. Adiós, tía Valeria, tienes las manos frías de las viudas que acarician bandadas de gallináceas negras. No importa. Te quiero igual, aunque tengas una vpz espaciada, tan distante que flota en el aire, como las gasas de los lutos ajenos. Te quiero porque te llamas Valeria hasta en la luna, porque en tres días no me espiaste para verme llorar y porque sé que sabes que yo sé.
Adiós, tía Valeria: no nos veremos nunca más'. Veré años después tu fotografía, y tu estarás cada vez más pálida entre las plantas cada vez más carnosas, con tu cara de saber que yo sé que Alejandro ha muerto.
Y lo sé. Cuando los demás creen que uno no sabe, intercambian miradas de complicidad tan exageradas que bastaría para enterar a cualquiera, o quizá lo hagn precisamente por eso, por puro juego de tentación; cuando sospechan que uno puede sospecharlo, olfatean aprensivamente, como si hubiera un perro muerto en algún lado, mientras hablan con hipocresía de los exquisitos perfumes de la estación; cuando saben que uno ya lo sabe-como Valeria-, se suman al mundo entero para ser nada más que testigos obstinados e indiferentes de 'eso' que nadie puede escamotear, porque ya sucedió, y por lo tanto continuará sucediendo aunque se olvide. Lo sé. Es útil que el abuelo Damián me haya traído hasta aquí, 'antes', hace tres días, y que ahora me lleve puntualmente de regreso, a la hora prometida, en el presagio de la tormenta y de la noche, como si sólo hubiera tratado de escaparle al viento, como si mientras tanto el viento hubiese pasado por mi casa cerrando solo de golpe una puerta que encontraremos cerrada para siempre al regresar. Yo sé que ha sido mucho más que el viento, mucho más que una puerta. Ha sio un precipicio que no me han dejado atravesar con los demás, por primera vez. Lo cayaron más para mí durante los tres días de las dos ausencias, sin saber que esa muerte se me ha cotagiado, a cualquier distancia, y que no me dejará jamás.
¿De qué manera y cuándo lo supe? Lo supe como muchas otras cosas, tratando de ver hasta no ver, o al revés [...] apareció la cara de mi hermano Alejandro.
Cerré los ojo, y con mis ojos cerrados lo vi con sus ojos cerrados. Tenía las mejillas más hundidas, los labios pálidos y un color muy triste, un colo de no volver más a ningún otro color, sino de ir desapareciendo cada vez más dentro de ese mismo color"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.16 y 17).



sábado, 17 de enero de 2015

Y TODAVÌA LA RUEDA...OLGA OROZCO

"Salimos al atardecer, cuando la tristeza cae como un pájaro enorme desde el azul al gris, sacudiendo puñados de ceniza, y cubre agonizando la llanura sin dejar avanzar al día que se va, que quizá se está yendo a mis espaldas bajo estas alas que no se terminan de cerrar.
No sé. Me propuse no volver la cabeza para que nada nos hiciera regresar. Tampoco puedo mirar a los costados para que la casa no vuelva a estar allí, para que no me sumerja de nuevo en esos cuartos que huelen a no salir jamás"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.15).


viernes, 16 de enero de 2015

MAMÁ, PAPÁ...OLGA OROZCO

"Mamá, papá, grito mientras caigo. Veo los dos rostros asomados al borde de la total oscuridad.
Uno avanza como una proa, a prueba de todo lo que se va, envuelto por el halo de lo irrecuperable, labrado por cuchillos que están hechos para tallar la fe, borroso tras las partículas de sombra en que se rompe la luna a los veinticuatro, a los veintiocho, a los treinta y seis años. Pero mamá no es mamá. Es la semilla ignorante de sí misma.

 El otro huye como una nave que se va, a prueba de todo lo que queda, envuelto por el halo de lo inalcanzable, labrado por cuchillos que están hechos para quebrar la fe, borroso tras las partículas de luz en que se rompe el sol a los veticuatro, a los venticinc, a los treinta y seis años. Pero papá no es papá. Es la semilla ignorante de otros hombres. 
Giro como la tierra adentro de este pozo. Algo me inspira. Subo. Mamá, papá, yo: un espléndido eclipse sobre la esperanza de una raza"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.13).


jueves, 15 de enero de 2015

FRAGMENTOS SIN PUNTUACIÓN...OLGA OROZCO

"[...] y se une a la otra volanta en la que parto al encuentro de lo desconocido irremediable hacia la irremediable soledad que hay detrá de cada cara a la que llamo con su último nombre para que se vaya cuando ya no está con la misma desesperación apasionada de tener que partir dos minutos después con el mismo hambre de loba con que disputo la porción de desdicha que me corresponde en lugar de costumbre en lugar de piedad para acariciar mi cabeza [...] 

en un adiós mientras parto en el tren vestida de viajera hacia la felicidad que se desliza por la trampa hasta estas cuatro paredes que huelen a pino y dan a un mar con manchas de tigre encerrado en la jaula donde vuelvo a hacer el recuento de mi vulnerable anatomía la misma a través de tantas edades cubiertas con la misma piel debajo de otras manos una mano para ganar la otra para perder y el resultado será el mismo aunque haya apostado el porvenir a un juego que se llama para siempre jamás [...]

y se lleva la polvoreada de los años de sequì para esconderlos avergonzada debajo de la cama con hhierros y bronces a los que se aferra mientras llora porque se es enana desde la cabeza gasta los pies y porque cada paraìso recuperado de manera particular es un paraìso vuelto a perder entre los nombres propios de los cuadernos siempre asida a los barrotes de madera aferrada al talismán de la fe para izarme hasta el borde de las pesadillas y salir del desván donde se guardan las cabezas cortadas de todas las edades [...] 

entre el vapor de invierno que se pega a los vidrios donde surge vestida de fantasma María de las Nieves con su mejor aullido para atormentarme mejor sin saber que ahora que no está dará los ojos que querían verla con tal de que volviera con el mismo traje que abandonó por el de treinta años después [...]

donde yacen con las palmas hacia arriba a la espera de que alguien me diga nunca más cortando así el circulo de las repeticiones y de las equivocaciones o de que me diga encontrarás eso por lo que excavas [...]

mientras yo soy siempre la niñita rezagada por el vértigo hacia arriba derribada por el vértigo hacia abajo y por el horror al vacío no a la soledad que elegí para no conciliar la paciencia y aventura para no se tú y yo en tibios encuentros sobre el tablón que atraviesa el estanque lado a lado desde un frente de casa a otro frente de casa que se unen y forman varios cuartos debajo de mi frente para guardar la intemperie por la que transito tomada de la mano de tía Adelaida

[...] cada vez creo menos en lo que veo sin que nadie interrumpa hasta que que comprenda que ya es demasiado tarde para volver a colgar un par de pantalones de hombre y una falda mìa repetidos hasta la eternidad en la misma percha dentro de ese ropero que debe de estar lleno de pañuelitos húmedos estrujados por muchas desesperaciones en el mismo monograma que no significa nada que es una impostura desde el comienzo hasta el final"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.8-12).

miércoles, 14 de enero de 2015

LA PUERTA...OLGA OROZCO

"Detrás está la puerta. No necesito llave para entrar. No perdì la inocencia [...] No puedo quedarme aquí. Debo buscar la puerta. Un paso hacia atrás, y da al vacío en que ruedo cada noche asida a un trozo de fe que me sobrepasa, como una sábana en la que me enredo, o arrastrando las naves de una catedral convertida en un cielo derribado"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.6).

martes, 13 de enero de 2015

CUANDO APRENDA...OLGA OROZCO

"Todavía no se hablar; cuando aprenda, habré olvidado el camino por donde vine"

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.6).

lunes, 12 de enero de 2015

HABÍA UNA VEZ...OLGA OROZCO

"Había una vez una casa (no). Había en un tiempo una casa (no). Había en varios tiempos varias casas que eran una sola casa. ¿Era realmente una casa o era un espejo fraguado por los tres tiempos, de modo que cada uno era la consecuencia y el motivo del otro? Sì, como caleidoscopios o como en un yo circular a manera de cuarto de vestir, donde la que va a ser con máscara de anciana se probara la máscara de la que fue con máscara de niña, y viceversa y sucesivamente. La máscara de la que es, también, y que sólo se ve desde adentro, desde el revés de todas las máscaras confundidas en una, hasta que se devore eso que habitualmente llamamos rostro y se pueda ver quién es quien lo devora, y entonces supongo que comprobaré lo que sospecho: que no se es uno sino todos.
Pero ahora el tiempo es y aparentemente soy yo sola. En este momento en que voy a nacer, en que voy a regresar, el tiempo y la persona que son yo soy" 

Olga Orozco en "La oscuridad es otro sol" (p.5).


sábado, 10 de enero de 2015

SOY UN SER INCOMPRENDIDO...

"Soy un ser incomprendido que se ahoga por el volcán de pasiones, de ideas, de sensaciones, de pensamientos, de creaciones que no pueden contenerse en mi seno y por eso estoy destinada a morir de amor…No soy feliz porque la vida no ha sido hecha para mí, porque soy una llama devorada por sí misma y que no se puede apagar; porque no he vencido con libertad la vida teniendo el derecho de gustar de los placeres, estando destinada a ser vendida como antiguamente los esclavos, a un marido…”

Nahui Olìn (1893-1978), poeta y pintora mexicana